¿QUIÉNES SOMOS?

Aquí no se juzga, solo se canta, se ríe y se comparte.

Nuestra Historia: Del Corazón Roto a la Lavadora

Proyecto despecho, es un concepto para un público que nace entre los 70 y 90, épocas que se marcaron por grandes intérpretes de la canción del género pop mexicano y al día de hoy se han hecho grandes clásicos de la época, que unen a familias y amigos a pasar un buen rato en compañía de una buena comida mexicana. somos un concepto 100% familiar en el que nuestros clientes cantarán y disfrutarán de nuestros platillos en compañía de una excelente música.

Nuestra historia y misión.
Un lugar para compartir.

Creamos una experiencia social diferente, aquí es un espacio donde no se juzga, aquí todos comparten con el mismo propósito de dejar atrás las penas. es una experiencia completa que tiene sus raíces en la tradición del despecho, un sentimiento que muchos han experimentado, y donde la gastronomía y coctelería juegan un papel importante. El despecho no es solo un restaurante o un karaoke, es una experiencia completa que tiene sus raíces en la expresión cultural y emocional.

Quiénes Somos

Aquí no se juzga, solo se canta, se ríe y se comparte.

Our services

Provide a general summary of the services you provide, highlighting key features and benefits for potential clients.

VISION

Ser el bar preferido para quienes desean decirle adiós a las lágrimas y hola a la diversión.

a man riding a skateboard down the side of a ramp
a man riding a skateboard down the side of a ramp
MISION

Transformar el dolor del despecho en una experiencia alegre, compartida y llena de música.

black blue and yellow textile
black blue and yellow textile

Crear un lugar seguro y divertido donde los corazones rotos—y los felices también—encuentren consuelo, rían, canten y compartan experiencias inolvidables.

Nacimos de la idea de unir el espíritu festivo de la cultura mexicana con la realidad universal del desamor. Queremos demostrar que con la canción adecuada, un par de tacos y una buena compañía, se puede superar cualquier pena.

Memorias Lavadas

Capturas de cómo convertimos el dolor en celebración